Tiger Woods

Cuando hablamos de torneos memorables nuestra cabeza se trasporta inmediatamente a Pebble Beach, para recordar la 100º edición del US Open.

Un evento que tuvo de todo, un field lleno de grandes nombres, un joven Tiger Woods que se encontraba en su mejor época y batiendo todos los records, y el último US Open para Jack Nicklaus.

El campeón defensor del torneo era el querido Payne Stewart, quien había fallecido poco tiempo antes del evento por un accidente de aviación. Por este motivo, la USGA decidió realizarle varias ceremonias durante dicha semana, con la presencia de su mujer, Tracey,  y sus amigos Paul Azinger, Phil Mickelson, Davis Love III, David Duval, Sergio Garcia, Mike Hicks (el caddie de Payne), entre otros.

PRIMERA VUELTA

Las condiciones del día fueron totalmente distintas a la mañana que a la tarde, y quienes salieron temprano pudieron sacar provecho de esto. Woods tomo el liderato del torneo desde el inicio, firmando su primera tarjeta con un score de 65, para superar al español Miguel Angel Jimenez por un golpe de diferencia.

Esta ronda debió ser suspendida por la densa niebla que había a la tarde, generando que 75 jugadores deban finalizar su ronda el día siguiente.

SEGUNDA VUELTA

Las condiciones meteorológicas empeoraron, y esto se vio reflejado en los resultados, excepto en el de Tiger, que mostraba un juego sin fallas.

El tigre se encontraba confiado y dejando tiros que quedaron en la memoria de muchos, como aquel en el hoyo 6 detrás del ciprés, alcanzando el par 5 en dos y dejándola a solamente 15 pies. Woods haría birdie en ese hoyo, y tambien en el 7 y 11.

La oscuridad los encontró en el par 3 del 12, siendo su último hoyo y luego debieron retirarse al house. Allí, Tiger logro meter un largo putt de 30 pies para llevarse otro birdie más y seguir marcando la diferencia con el resto.

Al completar su vuelta, Woods comete su primer error, tirando una pelota al agua en el emblemático 18 de Pebble Beach, con lo que finalizaría con 69 (-2), y de esta manera ampliaba su ventaja sobre sus seguidores Jimenez y Bjorn, a seis golpes.

Otro acto a recordar fue el último hoyo en un US Open del Golden Bear, donde el múltiple campeón del evento alcanzo el green en dos tiros, pero finalmente se iría con un par, al hacer tres putts.

TERCERA VUELTA

La tercera ronda comenzó con 63 jugadores en cancha, quienes superaron el corte de 149 golpes (+7 para el torneo). El sábado apareció un nuevo integrante en Pebble, el viento, que se presento con fuertes ráfagas, haciendo casi nulos los scores bajo par para el día.

Tiger experimento dificultades al iniciar su ronda, anotando un tiple bogey en su tercer hoyo, pero luego pudo volver al par de la cancha a base de birdies.

Su tarjeta de 71 golpes finalizo embocando un putt de 15 pies en el 9, para alargar la diferencia a 10 golpes, siendo esta la mayor ventaja en 54 hoyos para un US Open.

ÚLTIMA VUELTA

Tiger Woods termino su torneo de forma categórica, con una tarjeta de 67 golpes y sin errores. En su ida, Tiger hizo todos pares, fallando únicamente un fairway y un green. En el hoyo 10 se corto la racha y aparecieron los birdies, consiguiendo tres seguidos en el 12, 13 y 14.

De esta manera,  Woods consiguió una ronda libre de bogeys y un score total de (-12) para el evento, siendo el único jugador en finalizar bajo par durante dicha semana. Su margen de 15 golpes con respecto al segundo, se convirtió en un nuevo record en los majors, superando la marca de 13 que había establecido Tom Morris en el Open de 1862.

Por otro lado, el tigre se corono como el primer jugador en lograr una cifra de dos dígitos bajo par en un US Open, acto que luego fue igualado por Rory McIlroy en 2011, Brooks Koepka en 2017 y Gary Woodland en 2019.